¿Es mejor vender mi Bitcoin o pedir préstamo con él como garantía?

Has estado holdeando Bitcoin por un tiempo. Tal vez lo compraste hace años, tal vez más recientemente; en todo caso, crees que vale la pena mantenerlo a largo plazo. Pero la vida no se detiene mientras lo mantienes.

Hay un proyecto en casa, una idea de Negocios o quizá algo que simplemente quieres hacer sin cobrar hoy lo que reservaste para el futuro.

Así que te enfrentas a la pregunta que tarde o temprano se hace todo inversor: ¿Vendo lo que tengo o puedo usarlo sin tener que renunciar a ello?

La forma tradicional: vender tus Activos.

Vender Bitcoin es la opción más directa. Tocas un par de botones, tu BTC se convierte en efectivo y puedes gastarlo de inmediato.

Parece sencillo… hasta que el Mercado vuelve a subir. El Bitcoin que vendiste a $30,000 puede valer $60,000 después. Sales de tu Posición y, para volver a entrar, tendrías que comprar a un precio más alto.

Además, vender tiene implicaciones fiscales en muchos países. En el momento en que vendes, tus ganancias pueden quedar sujetas a impuestos.

Entonces sí, vender te da liquidez inmediata, pero es definitivo. Es como talar un árbol frutal solo porque necesitas las manzanas. Obtienes lo que quieres ahora, pero pierdes lo que podría haber crecido después.

La nueva forma: pedir préstamo usando lo que ya tienes.

Ahora, los holders de Bitcoin pueden hacer lo que las personas con capital han hecho por generaciones.

Cuando los propietarios de una casa necesitan efectivo, no venden la casa: piden préstamo usando su valor como garantía. Cuando los inversores necesitan liquidez, no liquidan sus acciones: las usan como Garantía.

Tú puedes hacer lo mismo con Bitcoin.

Cuando pides préstamo usando tu Bitcoin como garantía, no lo estás vendiendo. Simplemente lo bloqueas como Garantía, como si lo colocaras en una bóveda digital segura mientras tomas un préstamo respaldado por lo que ya posees.

Esto es lo que sucede en la práctica:

• Decides cuánto te gustaría pedir préstamo.
• La plataforma calcula cuánto vale eso en comparación con tu Bitcoin. Si tu BTC vale $50,000, podrías pedir prestados alrededor de $10,000 a $15,000 de forma prudente.
• Recibes ese monto en efectivo o en stablecoins. Puedes usarlo para lo que quieras: invertir, pagar cuentas o fondear un proyecto.
• Mientras tu Bitcoin está empeñado como Garantía, se mantiene seguro durante todo el plazo del préstamo. No puedes acceder ni operar con él durante ese tiempo, pero sigue vinculado a tu cuenta y se libera por completo una vez que amortizas el préstamo.

¿Qué sucede si el precio de Bitcoin cambia?

Si el precio de Bitcoin sube, el valor de tu Garantía también aumenta, y eso son buenas noticias. Conservas el potencial al alza e incluso puedes pedir más préstamo después si lo deseas.

Si el Mercado cae, tu loan-to-value ratio, o LTV, cambia automáticamente. El LTV es una forma sencilla de medir qué tan riesgoso es tu préstamo. Compara cuánto has pedido prestado con cuánto vale tu Garantía en Bitcoin.

Por ejemplo, si pides $10,000 y tu Garantía en Bitcoin vale $50,000, tu LTV es del 20%. Eso se considera muy seguro.

Pero si el precio de Bitcoin baja y tu Garantía cae a $33,000, tu LTV sube aproximadamente al 30%. Sigues debiendo los mismos $10,000, pero tu Activo de respaldo ahora vale menos, así que la proporción aumenta.

Cada plataforma tiene un umbral de seguridad. Si tu LTV sube demasiado (por ejemplo, hacia el 70–80 %), recibirás una notificación para que elijas entre:

• Agregar más Bitcoin como Garantía, lo que eleva el valor total que respalda tu préstamo, o
• Amortizar una parte de tu préstamo, lo que reduce lo que debes.

Si no haces nada y el precio sigue cayendo, el sistema puede vender automáticamente una pequeña parte de tu Bitcoin para reequilibrar el LTV y evitar una liquidación total.

Ese mecanismo te protege tanto a ti como a la plataforma, ya que garantiza que tu préstamo siempre esté respaldado, incluso en un Mercado volátil.

Por qué esta estrategia les atrae a los holders de largo plazo.

Pedir préstamo usando Bitcoin como Garantía no se trata de endeudarte sin control. Se trata de pensar como un dueño de Activos. Has construido algo valioso. Ahora, en lugar de venderlo, aprendes a usarlo, sin perder su posible potencial a futuro.

Es el mismo principio que han seguido las familias con capital durante décadas:

Mantienen sus Activos trabajando en segundo plano y, cuando necesitan liquidez, piden préstamo en lugar de vender los Activos en los que confían que van a crecer.

Este enfoque te permite seguir invertido en algo en lo que crees y, al mismo tiempo, mantener flexibilidad en tu vida diaria.

Pero no deja de implicar responsabilidad.

Todo préstamo, incluso uno respaldado por Bitcoin, conlleva responsabilidad. Si el Mercado cae con fuerza y tu Garantía pierde valor, puede que tengas que intervenir, ya sea agregando más Bitcoin o pagando una parte de lo que pediste prestado.

Por eso los prestatarios prudentes no toman el máximo posible. Se mantienen conservadores y solo piden lo que realmente necesitan, no lo que la calculadora indica como tope.

Así, incluso si el Mercado cae, siguen teniendo margen para maniobrar.

Cómo funciona en Nexo.

En plataformas como Nexo, pedir préstamo usando Bitcoin como Garantía está diseñado para ser simple y flexible:

• Agregas tu Bitcoin como Garantía.
• Recibes Fondos al instante, sin revisiones de crédito ni largos procesos de aprobación.
• Recibes los Fondos en FiatX* o en stablecoins como USDC.
• Amortizas cuando tú decidas.
• Tu Bitcoin se empeña como Garantía y se bloquea temporalmente durante el préstamo, pero sigue ganando valor si el Mercado sube.

Y cuando cancelas tu préstamo por completo, tu BTC se libera y vuelve a ti exactamente como estaba.

Descubre cómo funciona en nexo.com/borrow.

La perspectiva más amplia.

Durante años, Bitcoin se veía como un experimento riesgoso, algo que solo interesaba a los primeros usuarios o a los entusiastas de la tecnología. Esa historia cambió.

En 2025, Bitcoin pasó de los márgenes al centro del sistema financiero. Grandes gestores de Activos, fondos de cobertura e incluso Empresas que cotizan en bolsa ahora lo incluyen en sus balances. Los bancos están desarrollando servicios de custodia cripto. Los reguladores están creando marcos más claros en lugar de prohibiciones generales.

Esta creciente participación institucional demuestra un mayor grado de madurez. Bitcoin ya no es solo “oro digital”, sino que se está convirtiendo en una clase de Activo reconocida. Las instituciones lo tratan cada vez menos como una apuesta y más como algo que debe estar en carteras diversificadas junto con acciones y bonos.

Ese cambio también transforma la forma en que piensan las personas. En lugar de ver Bitcoin como algo para hacer transacción o hacer timing perfecto, cada vez más personas lo consideran un Activo que hay que gestionar: para pedir préstamo con él, Ganar intereses y mantenerlo como parte de una estrategia de capital a largo plazo.

*FiatX representa versiones digitales de monedas tradicionales que se usan dentro de la plataforma Nexo.

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